No todo son sonrisas ambiguas. No siempre es grato encontrarse con alguien. Que emborracharse puede hacer que tengas la peor noche en mucho tiempo. Que los besos duelen. Y que los Lunes se han hecho para suicidarse.
Aunque sin embargo hay días en los que las sonrisas se convierten en preguntas y pícaras se responden a sí mismas con besos en noches de borrachera que hacen que pienses que ésta va a ser la mejor noche de tu vida. Y por si fuera poco te encuentras con alguien a quién echabas de menos y entonces piensas; ¡Qué buena semana me augura el Lunes! Aunque no sea este.
Ésta es mi invitación formal. Os invito a mi mundo.
¿Estáis preparados?