A pesar de que haya descubierto que las princesas viven en cajitas y son adictas a la nieve. A pesar de que lo que leo nunca llegue a ocurrirme y aún siendo plenamente consciente tenga la esperanza de vivirlo. A pesar de que viva enganchado a pasar las noches en vela y mi futuro sea una caja de
dormidinas. A pesar de todo, seguiré comiendo
sugus.
¡Hay recuerdos cómo algodones de azúcar!
8 comentarios:
Preciós, Xavi. Com sempre. Quan llegeixo textos teus, em fa pensar en cançons de la casa azul, i creu-me que això és molt positiu per a mi :P
un petonàs, maco.
hermoso, hermoso!.... yo también como sugus todavía XD
Ains Víctor, m'encanta que em diguis això, serveixen d'algo més que per aclarir-me les idees.
Qué pena que seas de Barcelona. Pareces interesante.
Pues a mi nunca me gustaron los sugus! Me conformaria con unos lacasitos...
También conozco historias de lacasitos... =)
ufff que buenos gustos majo! amo los sugus.
ay esos recuerdos... o deberia de decir, ay esa memoria?
besos y saludos sugosos.
Ay esos recuerdos! Ay esa memoria!
Muy buenos los besos sugosos! =)
Publicar un comentario